El que se nos presenta al que probablemente sea el mayor coleccionista del mundo, el brasileño Zero Freitas. El artículo explica las vicisitudes por las que tiene que tiene que pasar este adinerado de 62 años que desde hace 40 años no puede evitar comprar todos los discos que se le pongan por delante. “He ido a terapia durante 40 años para poder explicarme a mi mismo las razones de mi conducta”, explica el empresario afincado en Sao Paulo. Su primer disco lo compró en 1964: Roberto Carlos Sings to the Children. Al acabar el instituto ya tenía más de 3000 discos. Cumplidos los 30 años ya poseía 30.000 discos.
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